


Raquel tiene
un cuento, El ratón más grande del mundo, que está formado por ocho
partes en forma de tarjetas postales y que se manda por correo (a nosotros nos
lo envió).
¿Te
gustaba leer cuando eras pequeña?
Me encantaba
leer y me encantaba escribir y dibujar.
¿Qué
historias te gustaban cuando eras pequeña?
Mi madre
inventaba cuentos para que mi hermana y yo fuéramos felices a la hora de irnos
a dormir. Supongo que la imaginación de mi madre y sus cuentos fue la semilla
de los cuentos que ahora invento yo.
No me gusta
elegir. Me gusta cantar mientras dibujo y escribir a todas horas.
¿De tus
sueños salen los cuentos que escribes?
Me inspira
cualquier cosa, nunca sabes en qué momento va a surgir un cuento, una idea. Lo
difícil es encontrar el final de la historia. Cuando uno enciende la máquina de
imaginar ya es imposible detenerla, se te ocurren ideas a cada momento,
descubres que hay un cuento para cada cosa.
Mi libro
favorito, o el que yo creo que es más bonito, es “Cenicienta, la verdadera
historia contada por ella”
¿Cómo
aprendiste a dibujar?
Aprendo cada
día, se trata de dibujar mucho y de admirar el trabajo de artistas que dibujan
mejor que tú.